29.1.09

(...)


Forgiving you is hard.

Forgetting you... That's impossible.

Forgiven Princess

26.1.09

Palabras



Palabras. Conjuntos de letras. Aisladas no tienen mayor valor que una definición. Parecen pequeñas, el lugar que ocupan es tan minúsculo...

Y sin embargo, ¿por qué nos vienen grandes? Hay veces que no te caben en la boca, no puedes soltar todo lo que llevas dentro, porque no existen palabras para ello. No existen... ¿O es que no las encontramos? ¿Tenemos miedo de expresar algo que nos viene grande?

Hay palabras enormes, palabras impensables, indeseables, inalcanzables. Amor, paz, odio, felicidad... Términos, términos y más términos. Dudas, deseos, esperanzas... Sin duda las palabras mueven el mundo.

¿Qué sería del mundo sin palabras? No nos conoceríamos, o tal vez no como nos conocemos. Las palabras nos hacen libres, las palabras nos dan el poder. La gran frase que un sabio dijo: Podrán partirme los huesos con palos y piedras, pero las palabras dolerán para siempre.

Y sin embargo, es algo tan... Volátil, frágil, manipulable. Se habla de don de palabra, de palabrería, de palabros, palabrotas, apalabrar, incluso palabras de honor. ¿Qué tendrá que ver una camiseta con algo tan importante y duradero como las palabras?

Se desinfla el propio significado de palabra con todas esas palabras, con esos malos usos del término, con sus derivaciones... Palabrería. Derrochar palabras. Derrochamos su valor en decir sinsentidos, idioteces. Palabrotas. Son por definición desagradables.

Pero si una palabra como DINERO, tiene tantísimo poder... Si algo con 6 simples letras, como Hitler, puede hacer saltar de pánico a un superviviente de la II Guerra Mundial, ¿por qué se dice que las palabras se las lleva el viento?

¿Por qué nos dicen que no son ''más que simples palabras''? Ahora resulta que las palabras son simples, que no tienen fuerza ni valor. Que no perdurarán. Que no sirven de nada.

Ese es el dicho que más odio. Porque sí, de acuerdo, los hechos estarán ahí eternamente... Pero, ¿cómo se transmitirán si no es mediante las palabras? ¿Cómo recordar las hazañas de Alejandro Magno, o las barbaridades de la Inquisición, o la terrible Crisis del 29 sin ellas?

Dicen que las peores armas son las palabras, y es cierto. Se puede desarmar a una persona con tan solo unas palabras. Un sencillo ''ya no te amo'', ''te mentí'', ''yo lo hice'', sin duda pueden desmontar al más formado de los humanos.

Es tan sencillo, tan real, tan crudo... Que asusta.

Forgiven Princess

23.1.09

La nueva vida de Amanda


La vida en la calle era dura. Gracias a sus amigos había podido ir tirando para conseguir alimentos, ropa limpia y mantenerse limpia y con un aspecto decente. Sería una paria social, o como se denominase por aquél entonces a los jóvenes que escapaban de casa. Lo sería, pero no aparentaría serlo, ya que no se consideraba así. Simplemente era una superviviente. Como todos aquellos que la miraban con lástima cuando despertaba en un portal extraño de una extraña casa. Como todos aquellos que fingían preocuparse por cosas que realmente les importaban una mierda.

Como aquellos hipócritas... Como su madre. Aunque no sabía por cuánto tiempo.

Pasaban los días y su vida era igual que antes, solo que no pasaba las tardes repantingada en el sofá, ni las noches en una cómoda cama y colgada del teléfono. Pero no estaba rendida. No se daría por vencida, ni de coña.

Sin embargo, aquella mañana, cuando despertó, tenía un terrible dolor de cabeza. No se explicaba su procedencia, ya que no se había golpeado la cabeza, que ella recordase.

Así pues cogió su mochila y se encaminó hacia el ambulatorio más próximo. Notó que la gente la miraba entre asustada y sorprendida, pero no le dio mayor importancia a aquellos idiotas que no sabían lo que era vivir al raso.

Una vez dentro del ambulatorio, buscó un asiento y esperó. Aquella sala de urgencias estaba llena. Llena, y muchos de los casos no tenían urgencia ninguna. Un niño con mocos no es una urgencia, pensó. Un muchacho que va a cambiarse la venda no es una urgencia. Una señora con una irritación leve en el brazo no es una urgencia.

No permitió que su cabeza advirtiese los huesos rotos, los sangrados... No podía permitírselo. Y aquel olor... Aquel olor... Olía como su madre.

Era gracioso, hacía bastante tiempo que no pensaba en ella. Unos 4 o 5 días. Lo cierto es que tal vez no estuviese oliendo nada, tal vez solamente era su imaginación jugándole una mala pasada otra vez. Era triste que la asociase a lugares como un hospital. Le habría gustado recordarla por un pastel, una bonita sonrisa...

Pero... ¿Qué perdía echando una ojeada? Se descubrió a sí misma mirando a todos los pacientes, uno por uno, buscando a su madre. Y la descubrió, de pie, junto a la puerta, observándola fijamente, con el labio inferior tembloroso y los ojos vidriosos. Tal vez no por ella, si no por el gran moratón que sobresalía por el cuello de la camiseta.

Lentamente, como si algo la obligase a no hacerlo, fue acercándose a su hija. Ahora lloraba, y una leve sonrisa se abría camino entre los temblores y el llanto.

-Oh, Amanda... Lo siento... Te echaba tanto de menos... Lo siento... ¿Dónde has estado, hija? Oh cielo, cuánto lo siento...

- Estoy bien, mamá... Tú no puedes decir lo mismo, por lo que veo... He estado... Por ahí. ¿Te lo ha hecho él? ¿Eh?

Su madre estalló en un llanto desolador, y aunque tenía unas inmensas ganas de decir: te lo dije, no sirve para nada, es un maldito cabrón extorsionador... Decidió rodear los hombros de su madre suavemente y consolarla con palabras agradables y dulces.

Tras calmarse, su madre le contó que desde que ella se marchó su padre había sido más y más violento, y que ya se había cansado. Pensaba denunciarlo, y ya había buscado un piso en el cual alojarse. Todas sus cosas habían sido poco a poco llevadas al piso, y también las de Amanda. La última parte del pasado que su madre conservaría iba en el coche.

Entraron juntas a la consulta, y dijeron que Amanda había sufrido un aparatoso unos días atrás. Le extrajeron unos cristales pequeños, y le limpiaron la sangre que había hecho una especie de costra con su pelo. Una vez curada ella, su madre se quitó la camiseta y los pantalones, le dijo al médico el origen y solicitó un médico forense que pudiese cursar la denuncia. Pasó vergüenza, un bochorno impensable, pero la mujer estaba convencida de que merecía la pena... Y su niña estaba a su lado para apoyarla.

Cuando risueñas salieron de la consulta, corrieron al banco, vaciaron todas las cuentas que les pertenecían y escaparon al piso de la madre de Amanda.

Tardaron exactamente 5 horas y media en llegar. Habían parado para comer. El viaje fue largo, pero al llegar a aquel pueblecito costero, la brisa sobre sus rostros, los colores blancos de las fachadas y unos pescadores desdentados que les indicaron la dirección, supieron que estaban en casa. En SU casa.

Exceptuando los juicios, jamás supieron de él de nuevo. Ambas cambiaron de nombre, un engorro menor comparado con aquel demonio de hombre, mal padre, alcohólico y putero que las había torturado durante años.

Tras instalarse, la madre de Amanda la miró fijamente. Estaba radiante, sonriente, más guapa de lo que recordaba haberla visto jamás.

-Mamá...
-¿Sí, cielo?
-¿Vamos a tomar un helado a la playa?
-Claro, claro que vamos.

Una soleada tarde de septiembre una mujer rubia acompañada de una jovencita morena paseaban por un pequeño pueblo andaluz, buscando una heladería, agarradas de la cintura, y deslumbrando al sol con sus sonrisas.

Forgiven Princess

20.1.09

Goodbye, Mr. Bush!


http://www.goear.com/listen.php?v=2db347d
(por si no se carga bien, ahí tenéis el link, vía goear)



Pink - Dear Mr. President


Dear Mr. President,

Come take a walk with me.

Let's pretend we're just two people and

You're not better than me.

I'd like to ask you some questions if we can speak honestly.


What do you feel when you see all the homeless on the street?

Who do you pray for at night before you go to sleep?

What do you feel when you look in the mirror?

Are you proud?


How do you sleep while the rest of us cry?

How do you dream when a mother has no chance to say goodbye?

How do you walk with your head held high?

Can you even look me in the eye

And tell me why?


Dear Mr. President,

Were you a lonely boy?

Are you a lonely boy?

Are you a lonely boy?


How can you say

No child is left behind?

We're not dumb and we're not blind.

They're all sitting in your cells

While you pave the road to hell.


What kind of father would take his own daughter's rights away?

And what kind of father might hate his own daughter if she were gay?

I can only imagine what the first lady has to say

You've come a long way from whiskey and cocaine.


How do you sleep while the rest of us cry?

How do you dream when a mother has no chance to say goodbye?

How do you walk with your head held high?

Can you even look me in the eye?


Let me tell you 'bout hard work

Minimum wage with a baby on the way


Let me tell you 'bout hard work

Rebuilding your house after the bombs took them away


Let me tell you 'bout hard work

Building a bed out of a cardboard box


Let me tell you 'bout hard work

Hard work

Hard work


You don't know nothing 'bout hard work

Hard work

Hard work


Oh


How do you sleep at night?

How do you walk with your head held high?

Dear Mr. President,

You'd never take a walk with me.

Would you?



Adiós, presidente Bush, ya no volverás a hacerle daño a esta inmensa herencia que tenemos que dejar a futuras generaciones.


Adiós, promotor de absurdas guerras, de medidas económicos y presupuestos aberrantes, defensor de ideas retrógradas y sin sentido.


Adiós, ciego ante la galopante crisis que se nos echaba encima. Sordo ante las súplicas de ''Peace Not War''. Mudo ante escándalos sociales y situaciones insostenibles.


Descuida de los trabajadores que dejaste atrás no intentarán seguirte si no les obligan. Son ya muchos los que por tus políticas quedaron sin trabajo. Muchos los que se habrían arrancado la cabellera cuando llegaban las facturas y la cuenta bajaba del rojo al granate.


Por favor, no hagas ruido cuando la puerta te dé en el culo, y no vuelvas a la Casa Blanca. Si se te olvida algo, ya harán que te lo manden, pero no vuelvas ¡NUNCA!

Gracias al cielo, "Yes we can" elegir bien. Les ha costado 8 años darse cuenta, pero al fin han decidido bien quién era la persona conveniente para sacar (o encauzar las cosas) al país de esta crisis (y consecuentemente al mundo en mayor o menor medida), para dedicar los presupuestos a lo importante y no tanto a la guerra.

Ahora solo cabe esperar que, realmente, Barack Obama sea el futuro. Sea el cambio. Sea lo que necesita EEUU en estos momentos.

Aunque, sin duda alguna... Yo estoy dispuesta a esperar.

Forgiven Princess

P.D. El formato es el que le sale de las... a Blogger, porque lo he editado como 15 veces y nada, así que... que le zurzan.

19.1.09

T_T


Las cuchillas duelen,
los ríos anegan,
los ácidos huelen,
las drogas ciegan,
las armas cuestan,
los nudos ceden,
los gases apestan...
¡Mejor vivir si se puede...!

"¿Sabes qué es lo bueno del dolor? Que te indica que todavía no estás muerto."

Forgiven Princess

13.1.09

¿...?


¿Por qué creemos vivir en la época del conocimiento y el descubrimiento, si cada vez las universidades e institutos están más despoblados?

¿Por qué hay gente que se resiste a aceptar al diferente, que no es peor ni mejor, si no igual a él?

¿Por qué decimos que nos arrepentimos de haber hecho cosas que, ni en su momento ni ahora, nos hacen realmente sentir arrepentimiento?

¿Por qué no nos bastan las estaciones que tenemos? ¿Por qué no estamos conformes con la primavera refrescante y florida, y no sabemos disfrutar del caluroso y soleado verano, y no agradecemos el melancólico y bucólico otoño, y nos metemos con el frío y hermoso invierno?

¿Por qué los que se ahogan en un vaso de agua al grito de ''crisis'', son los que dominan los océanos de riquezas?

¿Por qué aquél que se las da de antropofílico, de altruista, siempre y cuando tenga de sobra y basta para él para dos o tres vidas, niega a sus congéneres lo básico si estos van sucios o no le van a reportar publicidad?

¿Y cuál es el motivo de que la ilusión haya muerto prematuramente? ¿Por qué los niños de hoy día no dedican ni un minuto a soñar, a ser ''niños'' como fuimos algún día nosotros, y todavía hoy seguimos siendo?

¿Qué hay de malo en una risa, en un abrazo, en un beso, aunque rompa estereotipos?

¿Por qué nadie pierde ni un minuto de su tiempo en resolver estas preguntas?

Os diré por qué. Estamos hastiados del mundo. El mundo está cansado de sí mismo. Se da asco porque sabe que vive un desenfreno, baja por una pendiente sin control y no sabe que le espera al final. Y tiene miedo de que si ayuda al prójimo y pierde un poco de lo suyo, el prójimo no sea ese cojín que anhela para no darse la gran hostia.

Tanto asco y tanto miedo se tienen a sí mismos, que proyectan su amor propio en el amor que creen recibir de sus vecinos.

¿Que por qué?

Miles, millones de años de evolución. Desde apenas unas proteínas, a complejísimos seres humanos. Durante todo este tiempo, hemos estado evolucionando, desarrollando nuestras capacidades, consiguiendo perpetuarnos como plaga de este mundo.

Somos lo peor que le podía haber pasado al planeta, y es cierto, muy cierto. Nada de hablar de bombas, ni de armas químicas, ni de ochos cuartos. Ni bombas, ni armas químicas, ni concepto de ochos cuartos existirían sin nosotros.

Y no podemos hablar tampoco de mejoras del mundo. No hemos hecho ABSOLUTAMENTE nada por nuestro planeta. Pero nada de nada de nada. Al contrario, no hacemos más que abusar de ella, de morder la mano que nos da de comer. Talas masivas, vertidos tóxicos, caza furtiva...

Y cuando hablan de ''personas'', refiriéndose a esos humanos que gobiernan superpotencias mundiales llamados, por ejemplo, Jorgito... Me hierve la sangre.

Y al ver todo lo que hicimos, lo que hacemos, y lo que haremos... Me da asco pertenecer a la misma especie que ellos.

Forgiven Princess

8.1.09

Diálogos de cama


María: Joder, voy llena de moratones...

Forgiven: ¿Y a mí que me cuentas?

María: Es tu culpa... Me maltratas. Ya no jugamos más a mordernos.

Forgiven: xDDDDDDDDDDDD Yo te lo había dicho...

(Nota de la autora: Estábamos en casa de mi padre, y dormimos en una cama de matrimonio. Y, IMPORTANTE, jugamos a mordernos, literalmente. Intentamos morder a la otra [sí, es un juego tonto, pero estamos encerradas, algo hay que hacer xD], y al final, pasa lo que pasa.)

Forgiven Princess

5.1.09

La huida de Amanda

Le dolía horriblemente la cabeza. ¿Donde estaba?

Entonces recordó.

Solo hacía 4 semanas que se marchó, pero parecían 4 meses.

No aguantaba más en casa. Los gritos, los golpes, no eran nada comparados con la indiferencia, los insultos, y sobre todo, con la falsa compasión de cuantos la rodeaban.

Compasión que encubría la hipocresía, l
os telodije, los algohabráshechoparaquelohaga, los esculpatuya, los estáenfermocompréndele... No quería oírlos nunca más, escondidos tras frases del estilo: A mí no me darían más... Tranquila, seguro que era un arrebato... Iba bebido, él no es así, yo lo conozco...


Odiaba aquellas frases. No puedes decir que no te darían más, imbécil, no estás en mi lugar. Solía pensarlo. Tú no lo conoces, porque no se conoce ni él. Eso también lo pensaba a menudo.

Pero sin embargo, nunca se animaba a huir. No podía dejar a su madre sola con aquella bestia. Le daba igual pagar los platos rotos día tras día.

Hasta aquel día. Él llegó del trabajo, apestando a whisky y tabaco, y con señales de pintalabios barato en la camisa. Su madre había hecho la cena, como siempre, para que fuera ingerida a las 20:45. Pero ya eran las 22:30, y su padre no había llegado. Habían cenado tras recalentar la comida, y tras recoger la mesa y fregar, se habían dedicado cada una a lo suyo.

Alrededor de la medianoche, y tras un golpe con la puerta y una sarta de maldiciones, su padre hizo una aparición estelar irrumpiendo en el salón. ''¡Marta! ¿Dónde coño está mi cena?" gritó.

Su madre corrió a la cocina, pero su padre iba más rápido. Cuando llegó, vio que los platos estaban limpios, y la cena estaba en la olla.

Los gritos e insultos debieron oirse en todo el edificio. Y entonces escuchó el único ruido que no podía aguantar. La mano de su padre colisionando con la cara de su madre. Saltó del sofá, y corrió a la cocina. Su padre estaba de espaldas a la puerta. Decidió que era su oportunidad. La suya y la de su madre.

Ella estaba sentada en la esquina, y lloraba agarrándose la cara. Él tenía las piernas abiertas, y no lo pensó dos veces. Lanzó la pierna, y le asestó una patada en la entrepierna. Su padre cayó redondo al suelo, encogido en posición fetal y vociferando.

Creyó que todo estaba hecho, y cuando fue a coger el teléfono para llamar a la policía. Pero su madre tenía el teléfono. Y mientras se acercaba a su padre, la miró a los ojos gravemente y le dijo:

-¿Qué piensas que haces? Lárgate, no quiero verte. Cómo has podido hacerle esto a tu familia.

Y eso hizo. Corrió a su habitación, metió en una mochila grande toda la ropa que allí cabía, y en otra metió un par de mantas, unos cuantos libros, y todo el dinero que había a la vista en la casa.

Cerró la puerta de un fuerte portazo y bajó corriendo por las escaleras. Cogió un autobus y se bajó en la 4ª parada. Siempre le había gustado el número 4, así que pensó que para comenzar su nueva vida, era necesario empezar con un 4.

Así mismo, eran las 4 de la mañana. Escogió las escaleras de un edificio público, tal vez un juzgado. Allí, sacó las dos mantas y se dispuso a hacer lo que llevaba haciendo 19 años: sobrevivir.

Forgiven Princess