17.1.08

Roberto y ella (III)

Fue rápido.
Había estudiado la situación mil veces, dentro de su cabeza, desde que entraron en la casa.

6 meses...

Hacía tanto tiempo ya que ninguna mujer entraba en aquella casa con otro propósito que una visita de cortesía.

Se lanzó sobre ella, y sus labios buscaron los de la chica.

Tras un primer beso, su espalda se encogió en un escalofrío de arriba a abajo.

Ella lo tumbó en el otro extremo del sofá y se acostó sobre él.

Las manos se perdieron buscando el contacto con la piel del otro.


De fondo, el viejo reloj avisaba de que era la 1 de la mañana.

Quitaron de en medio la ropa, les agobiaba, les estorbaba.

Él la levantó y la tomó, ella abrazó su cuerpo con piernas y brazos, mientras lo besaba.

Su primera parada fue la pared, más tarde se recostaron sobre la suave alfombra frente a la chimenea chisporroteante.

Chispas rojizas y amarillentas celebraban en el hogar la pasión de la que la casa se llenaba.

El calor, el sudor, la piel de aquel ángel hallado en el infierno... La mente de Roberto se nubló.

Quería dejarse llevar, pero temía cometer algún fallo y fastidiar aquel mágico espectáculo, de errar y provocar que ELLA desapareciese de su casa y su vida para siempre.

La tomó en brazos, como un marido lleva a su esposa en la noche de bodas, y la llevó escaleras arriba.

Allí, una vasta habitación con una cama inmensa se abría ante ellos.

La dejó sobre la cama, y una vez allí, dieron rienda suelta a su pasión desenfrenada, dormida desde tanto tiempo atrás.

A la mañana siguiente, cuando ella aún dormía, él acarició su suave piel y olió su magnífica melena dorada.

Después bajó y preparó café, tostadas, galletas, un poco de fruta troceada y zumo. Lo colocó todo en una bandeja y lo subió silenciosamente a la habitación.

Lo dejó sobre la mesa y se metió a la ducha.

Cuando salió, su ángel había desaparecido, así como buena parte del desayuno que había preparado.

Pensareís que decayó y entristeció, pero al contrario de eso, sonrió y se sintió contento como no lo hacía desde mucho tiempo atrás.

Aquella mañana, el Roberto que nació hacía seis meses, pareció haber muerto. El Roberto que se sentaba frente al fuego con un whisky en la mano y se quedaba absorto observando las llamas había desaparecido misteriosamente.

En su lugar halló un joven atractivo, en forma, feliz y satisfecho con lo que tenía.

- Gracias, mi ángel.

Aquello fue lo que murmuró mientras recogía los restos del desayuno y se colocaba el traje.
Llegaba la hora de ir al trabajo.

(...)

Aquella noche se vio tentado de volver a aquel bar, pero prefirió dejarla marchar.

''Si realmente amas algo, debes dejarlo marchar''.

Espero que os haya gustado la historia.

Forgiven Princess

6 comentarios:

Anónimo dijo...

''Si realmente amas algo, debes dejarlo marchar''???
Lo siento pero no estoy de acuerdo...
Osea que es mejor tener un recuerdo bonito de algo en vez de tener ese algo presente en tu día a día???
Lo siento pero no, quizas roberto es mas cobarde de lo que creeis, y la deja marchar por miedo a estropar lo que fue una noche unica e inolvidable y convertirlo en algo real y duradero...
Weno es solo mi opinion, abra quien no la comparta pero pensadlo porfavor

Forgiven Princess dijo...

Juanra:
¿Nunca has oido el dicho?
Es muy popular, creo que hasta lo utilizaron en un anuncio de hamburguesas o algo así.
Roberto ''utiliza'' a la chica, digamos que la usa como salida a todos los problemas a los que se ha enfrentado recientemente (como la ruptura con su pareja), y canaliza esos sentimientos en una noche.
Es su manera de liberar sus ''penas'', de expresar todo lo que no puede con palabras.
Además, como se demuestra en la brevedad de su historia, tanto ella como él no querían tener nada más serio que un lío de una noche, porque como comento en el primer capítulo, no saben ni la edad, ni el nombre, ni el trabajo, ni donde vive el otro, no se conocen absolutamente de nada...
Es un ''capricho'', un flechazo... llámalo como prefieras.
Un besote!

Buttercup dijo...

Un lío de una sola noche,si pero con tanta pasión yo preferiría llamarlo amor fugaz de una sola noche.
Precioso relato,me gustó y gracias por aclarar mis dudas en el post anterior,pero no es fallo tuyo,es todo curiosidad mía.
Un beso y mejórate de tu rodilla...

Forgiven Princess dijo...

Buttercup:
Gracias, me alegro de que te haya gustado el relato.
De todas maneras yo contesto gustosamente las preguntas ^^.
Y gracias por lo de la rodilla, pero de momento aún me faltan 15 largos días de ir con muletas :S
Un besote!!

Forgiven Princess

Lara Vergara dijo...

Pues la historia me ha gustado, sí señor! Creo que esa historia hace que él tome confianza en si mismo, que vuelva a creer en su propia persona. Y ella, pues no sabemos mucho de su historia, pero seguro que aquella noche también le sirvió para enterrar alguna que otra frustación.
Sigue escribiendo, que lo haces muy bien.
Un beso!

Forgiven Princess dijo...

Lara:
Me alegro de que te halla gustado, eso es más o menos lo que pretendía plasmar en mi relato.
Un besote!