13.5.10

La gran final, el gran triunfo, LA GRAN ALEGRÍA


Este año sí que sí. Ayer sí que sí. Pasaron 14 años desde que el Atlético celebrase su último gran título (sus, aquella temporada 95/96 fue la del doblete).

48 años sin un título europeo.

Pero ya está bien de miserias. Ya basta de ser "El Pupas", de ser el último mono, de ser el equipo por todos criticado.

Ya basta de ver lágrimas en la cara de toda la afición atlética. Ya basta de caras de derrota, de partidos con el sabor de la cicuta.

Ayer el Atlético jugó, jugó como sabe, defendió como nunca, y se portó. Y además, con gente de cantera y con auténticos ídolos de la afición. No en vano, De Gea y Domínguez, vitales en el partido de ayer, son canteranos del equipo, y no hay nombres que resuenen más en las gargantas atléticas que los del Kun y el Uruguayo.

Y ayer, como cada vez, como siempre y como nunca, Diego y Sergio volvieron a hacer su juego. Y es que ambas jugadas fueron un mano a mano entre el argentino, que construía la jugada, y el uruguayo, que remataba con cualquiera de sus dos piernas.

El Cacha se portó, como siempre se ha portado pese a la mala racha que le acompañó parte de esta liga. Y entonces y ahora, yo dije, digo y diré lo mismo. Forlán es una pieza clave en el Atlético, al igual que el Kun. No tiene sentido gritar, e incluso pitarle como se llegó a hacer, por tener una mala racha.

A ti, sí, a ti, Diego, te debemos resurgir de un infierno que se acercaba al décimo quinto año, para subir al cielo y disfrutar.

Eso sí, siempre sufriendo, como ya es sello de identidad en el Atleti. Pero qué vamos a hacer, si somos la mejor afición del mundo... Pues sufrir con ellos para que, al final, ese gol, esa jugada, ese partido y esa victoria, supiesen a la más dulce y gratificante de todas las glorias.


¡¡¡¡¡U-RU-GUA-YO!!!!!

Forgiven Princess

6.5.10

No sé si me mueve más la ira, el orgullo, la tristeza o la nostalgia...